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Cuentos cantados sobre la luna y las estrellas (y otros muchos para seguir aprendiendo)

Os contaba hace unos días que la idea de hacer un guiño en la programación de este curso al tema del espacio surgió del interés que nuestro hijo pequeño ha mostrado los últimos meses. Y también os confesaba que yo misma he aprendido mucho, puesto que he ido acompañando su curiosidad a través de los libros y los materiales con los que nos íbamos haciendo. Como fuisteis muchos los que queríais conocer cuáles han sido esos títulos os dejo aquí unas breves reseñas y los enlaces para que podáis pedirlos online si os gustan (pincha sobre la imagen), o guardar el nombre e ir a buscarlos a vuestra librería más cercana 😉 Empezamos.

Cuentos para cantar y contar sobre la luna y las estrellas

 

1.     Luna, de Kalandraka

Un clásico infalible para contar ritmado y cantado, para leer hacia delante y hacia atrás, para seguir con el dedito y para memorizar como su primer poema. De 0 a 3 años, el regalo perfecto.

2.     Los planetas, de Miau de cartón

Es una de las novedades de 2019 y los dibujos tienen un encanto especial. El texto rimado es bastante curioso, un punto surrealista, pero si a los peques les gusta el tema les encantará también. Mejor de 1 a 4 años.

3.     La noche oscura, de Edebé

Un libro-juego que también puede cantarse. Tiene un texto muy simple, rimado en parte y con una entradilla que se repite en cada página. Por si fuera poco las ilustraciones cambian gracias a la intervención de los peques y sus deditos. A partir de un año.

4.     La luna está triste, de Edelvives

Este delicioso cuento ya no está disponible en librerías, pero lo podéis encontrar con bastante facilidad en bibliotecas públicas. Editado en cartoné y en un formato ideal para manos pequeñas, la versión cantada que nos habéis escuchado alguna vez hay que agradecérsela a la maravillosa narradora Carolina Barreira.

5.     ¿A qué sabe la luna?, de Kalandraka

El bestseller internacional que seguro que no falta en ninguna casa fue seguramente el culpable de que el título anterior fuera descatalogado. Aunque es un éxito asegurado el formato es grande y en papel por lo que es mejor que les acompañemos al manipularlo.

6.     Max dice buenas noches

Es un cuento muy apropiado para los momentos de lectura antes de dormir. Dulce y sencillo en su argumento, los niños se quedan prendados del personaje y de la historia.

7.     No me da miedo la oscuridad, de Usborne

Con troquelados y  bonitas ilustraciones es otra opción a tener en cuenta en el momento previo a las buenas noches. Muchos niños, a partir de los 2-3 años, empiezan a tener miedo a la oscuridad de la noche pero, a través del juego con la luz y la sombra e incluso acompañando la narración con una linterna que se cuele por los huecos de las páginas, podemos hacerles sentir más cómodos con ella.

Cuentos para aprender sobre el espacio

 

Aunque cada niño es un mundo, y nadie como vosotros para saber lo que necesita, las edades recomendadas de toda esta sección varían entre los 3 y los 8 años.

 

8.     El espacio, de Usborne

Atractivo, en cartoné y con múltiples pestañas para ir descubriendo, este título es seguramente el más sencillo de esta sección.

9.     El profesor Astrocat y las fronteras del espacio

En este libro se conjugan la rigurosidad del científico que lo escribe con la ligereza de sus guiños humorístico y breves anécdotas, como en la escena en que le dicen a Plutón que ya no es un planeta mientras él suelta un lagrimita. La estética es también muy especial.

10.El cielo y el espacio, de Ideaka

Aún no lo hemos leído completo porque es la última adquisición, en realidad un regalo. Hasta ahora lo que más nos ha gustado es la sección dedicada a resolver preguntas de esas hacen los peques y que, a veces, nos ponen a los mayores en un apuro. ¿Sabrías explicarle científicamente por qué el cielo es de color azul?

11.Planetarium, de Impedimenta

Un libro-joya, con ilustraciones tipo grabado que enamorarán a los mayores.

12.Atlas del espacio, de Lu

Muy interesantes los apuntes culturales como los distintos “cielos” (constelaciones) en los distintos hemisferios y culturas. La escritora es una reputada astrofísica dedicada  a la divulgación, un hermoso ejemplo de cómo podemos dar información de calidad al público infantil.

13.Viaje a los confines del universo, de Círculo de Lectores

Ya siento poneros los dientes largos porque este título está descatalogado y en este caso ni siquiera es fácil encontrarlo en bibliotecas. Pero es taaaaan especial… Un desplegable de unos 4 metros que puede leerse como libro también. Múltiples datos cruzados, curiosidades y comparativas entre planetas hacen su lectura muy entretenida.

14.Desde el universo hasta la Tierra, SM

Una historia del universo, desde el Big Bang a la creación de las estrellas o la aparición de vida en la Tierra. A pesar de la complejidad del tema está redactado de forma sencilla y narrativa, por lo que es uno de los pocos que se pueden leer de un tirón sin mucho esfuerzo.

15.El sistema solar, RBA National Geographic

Como sabréis es importante ofrecer a los niños imágenes reales del mundo,  y no sólo ilustraciones, para que el modelo que fijen en su mente sea el real y sobre él puedan hacer distintas conexiones y abstracciones. Este es uno de los principios Montessori y, aunque nosotros no trabajamos el método como tal en casa, tratamos de conocer distintos enfoques educativos y utilizar aquellas ideas que nos encajen en cada momento de la crianza. Este libro salió recientemente en los quioscos en una colección para adultos por el irrisorio precio de 1,95€. No lo leemos completo, por supuesto, pero disfrutamos reconociendo planetas u otros elementos del espacio en las bellísimas fotografías.

 

BONUS TRACK

Y si queréis hacer del momento de apagar la luz algo absolutamente mágico, podéis haceros con estas estrellas luminescentes para el techo que forman una reproducción real de las constelaciones. Eso sí, sólo apto para progenitores pacientes, ya os confirmo que pegar 270 estrellas de distintos tamaños en su lugar correcto lleva unas horitas… Una buena puesta en escena y un disfraz y ya sólo queda dejar que imaginación haga el resto. ¡Buenas noches!